¿Tienes redes sociales personales? – Entonces sabes perfectamente que una gran parte del entorno social se mueve en Internet. Si todos nos comunicamos y nos relacionamos con otros usuarios a través de plataformas online, ¿por qué iba a ser diferente para tu empresa?
Una comunicación online de calidad puede ser el mejor aliado para llegar a un mayor número de clientes potenciales que se sientan identificados contigo. Para ello necesitas establecer una relación bidireccional con los usuarios, es decir, crear una comunidad entorno a tu marca que aporte beneficios tanto a tu empresa como a tus seguidores.
¿Cómo? A través de un plan de Social Media con una estrategia clara y eficaz basada en unos objetivos empresariales. Esto es tan importante como tener una estrategia de negocio bien definida ya que te permitirá crear presencia e imagen de marca en Internet.
¿Cómo establecer una buena estrategia de social media?
Objetivos de tus redes sociales
Qué voy a hacer y cómo lo voy a hacer. Es imprescindible saber qué es lo que esperamos conseguir, tanto a corto como a largo plazo. Todo lo que haga en las redes sociales ira dirigido a tus objetivos.
Es muy importante que estos sean específicos, medibles, realistas y que te acerquen a los resultados esperados. Conforme vas ganado notoriedad y vas interactuando con tu público en las redes has de ir midiendo cómo funcionan esos objetivos para adaptarlos en caso de que te desvíen de tus metas.
Público que interactuará contigo
¿Cómo son mis seguidores o los usuarios a los que espero llegar? Entender las metas de tus clientes actuales y los potenciales te ayudará a enfocar tu estrategia de Social Media para que os conecte a ambos.
Para ello define sus motivaciones, el tipo de contenido que consumen, las redes sociales en las que se mueven, cómo se comunican, con quien interactúan, a qué horas son más activos, etc.
¿Qué canales voy a utilizar?
Una vez sabes dónde están tus clientes potenciales es hora de elegir las redes sociales donde moverte. Cada una tiene una personalidad propia y te puede ofrecer diferentes beneficios. No te dejes llevar solo por las más populares, existen pequeñas redes sociales muy tematizadas que funcionan bien para segmentar públicos.
Alcanza visibilidad desde un primer momento
Ya tienes los canales y los perfiles acorde a la imagen que quieres transmitir. Es hora de salir del anonimato y empezar a crear tu comunidad entorno a tu marca.
Puedes empezar utilizando tu base de datos con los clientes actuales e informarles de tu presencia en las redes para ir tejiendo tu entorno.
Ahora que lo tengo todo… ¿Qué contenido publico?
Dependiendo de tus objetivos crearás diferentes tipos de contenido. Pero lo que tienes que tener en cuenta es que debe de ser de calidad. Es decir, no debes publicar por publicar, porque los usuarios lo detectarán y crearás rechazo hacia la marca.
Todo el contenido debe de aportar valor a tus seguidores para nutrir la relación bidireccional y mantener su interés en ti.
Sabes cómo son tus clientes potenciales y a que le dedican su tiempo en las redes. Se creativo, innovador y constante. Esa es la clave para ganar credibilidad y confianza ya que una cuenta inactiva o intermitente solo aporta una imagen negativa.
Por último, es muy importante que lleves un control de medición para saber si tu estrategia funciona correctamente y si no es así en qué está fallando y cómo puedes reconducirla.
Una estrategia de Social Media requiere trabajo, constancia, objetivos, contenido de valor y una relación continua con tus seguidores. Se parte activa de la conversación que tu marca genera en las redes sociales.